11/11/2016
El largo proceso que ha supuesto la elección de un nuevo presidente pone de manifiesto las imperfecciones del sistema político libanés, basado en el reparto sectario del poder. El triunfo de Michel Aoun es el resultado de más de dos años de negociaciones y acuerdos, que han puesto de relieve las crisis internas respectivas de las dos alianzas en las que se dividen la mayoría de las formaciones políticas del país, al igual que los desafíos a los que se enfrentarán próximamente tanto el grupo chií Hezbollah, liderado por Hassan Nasrallah, como el movimiento suní Futuro, encabezado por el nuevo primer ministro, Saad Hariri.
Documento elaborado por María González-Úbeda Alférez.