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16/05/2023

Tiempos de inflexión histórica. La invasión de Ucrania y el declive del poder occidental.- Emilio Lamo de Espinosa

Estamos siendo testigos de una transformación social sin parangón desde la Revolución Industrial que nos aboca a un punto de inflexión histórico (post-Europa, sí, pero ¿también post-Occidente?) causado por dos variables claves: una demografía desequilibrada entre Occidente y el resto del mundo y que afecta sobre todo a Europa. Pero que se ha acoplado con una convergencia tecnológica pues Occidente ha perdido el monopolio de la tecnociencia de la que disfrutó desde hace al menos tres siglos y que fue la causa de su poder.

La economía es un juego de suma positiva; todos podemos ganar (o perder). Pero el poder es un juego de suma cero, agónico, y la emergencia de nuevos poderes en el mundo reduce el poder relativo de Occidente en la misma medida. No estamos ante una decadencia absoluta y Occidente tiene muchos activos, y aunque tenga también serios problemas internos, seguirá siendo un actor sin rival durante muchas décadas.

Pero la invasión de Ucrania preludia un periodo de turbulencias en el escenario internacional marcado por la «trampa de Tucídides»: la tensión entre una potencia emergente (China) y otra declinante (USA), tensión que articula, no solo la política exterior de esos dos gigantes, sino el orden internacional todo.

No obstante, en la coyuntura actual se puede atisbar también la posibilidad de una nueva paz, paz por equilibrio de poderes e interdependencia, paz liberal, «paz caliente» repleta de tensiones, más que una «guerra fría». Pues, a diferencia de la vieja URSS, China no pretende exportar su modelo sociopolítico y le es indiferente la forma política de los demás países.

Documento elaborado por Emilio Lamo de EspinosaCatedrático emérito de sociología (UCM), expresidente del Real Instituto Elcano.

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