18/11/2016
El autoproclamado Estado Islámico ha demostrado ser el mayor enemigo de la era global; ha sabido absorber capacidades y leer mejor que cualquier actor las corrientes proporcionadas por la tecnología y las tendencias sociales. Detrás de su fanatismo ha creado una infraestructura consolidada y elástica sin precedentes en la historia del terrorismo; un hecho que demuestra, una vez más, el compendio de errores que factura Occidente.
Documento elaborado por Jacobo Morillo Llovo.